El Gobierno de Bolivia emitió el Decreto Supremo 5096 el 3 de enero de 2024, estableciendo una medida significativa para la inclusión financiera y el desarrollo económico del país. A partir de este año, los Bancos Múltiples y Bancos Pyme deberán destinar el 6% de sus ganancias netas de 2023 al cumplimiento de la función social de los servicios financieros.

[Imagen de personas diversas accediendo a servicios financieros en Bolivia]

¿Qué es la función social de los servicios financieros?

La función social de los servicios financieros se refiere a la responsabilidad que tienen los bancos de contribuir al desarrollo económico y social del país. Esto implica brindar servicios financieros accesibles y asequibles a todos los sectores de la población, especialmente a los más vulnerables. Algunos ejemplos de iniciativas que cumplen con la función social incluyen:

• Microcréditos: préstamos pequeños otorgados a emprendedores y microempresarios para impulsar sus negocios.
• Educación financiera: programas que enseñan a las personas cómo administrar su dinero y tomar decisiones financieras informadas.
• Bancarización rural: llevar servicios financieros a zonas rurales que tradicionalmente no tienen acceso a ellos.

¿Cómo impactará esta medida a la población boliviana?

Se espera que el DS 5096 tenga un impacto positivo en la inclusión financiera y el desarrollo económico de Bolivia. Al destinar recursos a iniciativas de función social, los bancos podrán:

• Aumentar el acceso a servicios financieros: Esto permitirá a más personas ahorrar, invertir y emprender, lo que puede contribuir a la reducción de la pobreza y la desigualdad.
• Promover el crecimiento económico: Un mayor acceso al crédito puede impulsar el crecimiento de las microempresas y pequeñas empresas, generando más empleos y oportunidades.
• Fortalecer la estabilidad financiera: Una población financieramente educada y con acceso a servicios formales es menos vulnerable a crisis financieras.

¿Qué significa esto para ti?

Si eres boliviano, esta medida podría tener un impacto directo en tu vida. Por ejemplo:

• Podrías tener más acceso a créditos: Si eres emprendedor o microempresario, podrías acceder a préstamos con mejores condiciones para hacer crecer tu negocio.
• Podrías recibir educación financiera gratuita: Muchos bancos podrían ofrecer programas de educación financiera para ayudarte a administrar mejor tu dinero.
• Podrías tener acceso a servicios financieros en tu comunidad: Si vives en una zona rural, es posible que los bancos aumenten su presencia en tu localidad.

En resumen, el DS 5096 es un paso importante hacia una Bolivia más inclusiva y financieramente saludable. Esta medida se suma a los esfuerzos del Gobierno por construir una economía más justa y sostenible para todos.

Además de los beneficios mencionados anteriormente, esta medida también podría contribuir a:

• Reducir la informalidad: Al formalizar el acceso a servicios financieros, se puede reducir la informalidad en la economía, lo que beneficia tanto a los trabajadores como al Estado.
• Promover la innovación financiera: Los bancos se verán incentivados a desarrollar nuevos productos y servicios que atiendan las necesidades de los sectores más vulnerables.
• Fortalecer la confianza en el sistema financiero: Una mayor inclusión financiera puede contribuir a generar confianza en el sistema financiero en su conjunto.

Es importante destacar que el DS 5096 aún se encuentra en su etapa inicial de implementación. Se espera que en los próximos meses se emitan reglamentaciones específicas que establezcan los mecanismos para la aplicación de la medida. Sin embargo, el decreto ya ha generado expectativas positivas entre la población boliviana y se espera que tenga un impacto significativo en el desarrollo del país.

Por último, cabe mencionar que esta medida no está exenta de críticas. Algunos sectores señalan que podría afectar la rentabilidad de los bancos y obstaculizar el crecimiento del crédito. Sin embargo, el Gobierno ha asegurado que trabajará con el sector financiero para encontrar un equilibrio entre el cumplimiento de la función social y la sostenibilidad de los bancos.

El tiempo dirá si el DS 5096 cumple con sus objetivos. Sin embargo, no cabe duda de que se trata de una medida audaz y visionaria que podría marcar un hito en la historia de la inclusión financiera en Bolivia.