A pesar de los “vientos en contra” que sufre Latinoamérica (Latam) a raíz de la inflación, los elevados tipos de interés y la debilidad económica global, la región se dirige hacia un “repunte cíclico” a finales de año que se alargará durante 2024, según la Unidad de Inteligencia del grupo británico The Economist.
Los analistas anticipan que en los próximos meses comenzará a moderarse la inflación y los bancos centrales latinoamericanos recortarán tipos, aunque el Producto Interior Bruto (PIB) conjunto de la región crecerá “solamente” un 1.3 % en 2023.
Durante una conferencia virtual, los expertos de The Economist anticipan que Brasil, Chile y Perú rebajarán sus tipos de interés en la segunda mitad de este año, seguidos por Colombia y México el próximo año.
“Esta será la semilla de un repunte cíclico de la economía que se extenderá hacia 2024”, afirmó Robert Wood, economista principal de la Unidad de Inteligencia para Latam y el Caribe.
Con todo, “sin progresos en cuanto a reformas que impulsen la productividad, no esperamos tampoco un año estelar”, recalcó el analista, que anticipa un crecimiento de entre el 2 % y el 2.5 % en 2024.
Las decisiones que tomen los bancos centrales de grandes países como Brasil y México marcarán el estado de ánimo de los inversores, indicó Wood, que subrayó al mismo tiempo que países como Costa Rica y Uruguay ya han marcado el camino con recortes de tipos.
La Unidad de Inteligencia de The Economist destacó al mismo tiempo que la Inversión Extranjera Directa (IED) en Latinoamérica repuntó en 2022 hasta su máximo nivel en una década.
Las inversiones que se retrasaron por la pandemia de covid-19, junto con el elevado precio de las materias primas, han contribuido a ese “boom”, afirmó la analista Erica Fraga.
Como tercer factor determinante para ese incremento de la inversión, Fraga apuntó a la tendencia a que las firmas estadounidenses apuesten por puntos de producción más cercanos, ante las tensiones geopolíticas en el Pacífico y los problemas globales en las cadenas de suministro.
“Esto ha sido particularmente evidente en México, debido a su proximidad con Estados Unidos, pero creemos que otros países en la región se pueden estar beneficiando o pueden potencialmente beneficiarse”, agregó la experta.
La diversificación de algunas economías latinoamericanas respecto a las materias primas también ha sido “positiva” para la economía regional, recalcó.
Fuente: Forbes en español