Bolivia ha cesado sus exportaciones de gas a Argentina tras 18 años, marcando un cambio significativo en la dinámica energética regional y planteando nuevos desafíos para el país.
Bolivia ha cesado sus exportaciones de gas natural a Argentina después de 18 años, un comercio que generó cerca de 19 mil millones de dólares para el país. Este hecho, calificado como “histórico” por medios argentinos, marca un cambio significativo en la dinámica energética de la región. Ahora, Bolivia se perfila como un país de tránsito, una situación que varios analistas habían anticipado.
Según el diario argentino Río Negro, el suministro de gas boliviano a Argentina concluyó el miércoles 18 de septiembre, dos semanas antes de la fecha prevista. Fuentes de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) confirmaron que, aunque la última adenda del contrato fijaba el fin del acuerdo para el 30 de septiembre, los envíos ya fueron interrumpidos. Consultado sobre esta situación, el Ministerio de Hidrocarburos y Energías y YPFB no ofrecieron respuestas hasta el cierre de esta edición. Sin embargo, YPFB había señalado previamente que, ante el cese inminente de las exportaciones a Argentina, se estaba impulsando una “nueva línea de negocio” para convertir a Bolivia en un país de tránsito para el gas argentino con destino a Brasil, un mercado en crecimiento que sigue siendo relevante para Bolivia.
Causas y Consecuencias del Cese
El exministro de Hidrocarburos, Álvaro Ríos, explicó que la interrupción de las exportaciones se debe a la disminución en la producción de gas en Bolivia, causada por la falta de exploración de nuevos yacimientos. Este descenso, reconocido por el Gobierno de Luis Arce, ha generado tensiones y críticas hacia la gestión de Evo Morales. La producción de gas boliviano ha caído de un máximo de 60 millones de metros cúbicos por día en 2014 a aproximadamente 32 MMmcd este año.
Paralelamente, Argentina ha avanzado en el desarrollo del megacampo de Vaca Muerta, que comenzará a abastecer el norte del país en octubre, una vez que se completen las obras de reversión de los ductos. Mientras tanto, Argentina ha negociado con Chile la provisión temporal de gas por un período de hasta dos meses y medio. Este acuerdo, entre la estatal Enarsa y las empresas chilenas Engie Energía Chile y ENAP Refinerías, contempla un suministro de alrededor de 1,4 MMmcd. Cabe destacar que el gas que Argentina recibirá desde Chile es importado de terceros países, ya que Chile no cuenta con producción propia de este recurso.
Perspectivas y Preocupaciones
Expertos del sector hidrocarburífero advierten que, si no se modifica la actual política energética de Bolivia, caracterizada por el control estatal en la producción y comercialización del gas, las exportaciones a Brasil podrían cesar para 2030. “A este ritmo, cerraremos otra puerta con Brasil entre 2028 y 2029, y Bolivia se convertirá en un importador de gas. La política energética de los últimos 15 años ha sido un fracaso. Dolerá, y será aún más doloroso”, señaló Álvaro Ríos.
Pensar en el fin de las exportaciones de gas a Argentina representa un punto de inflexión para Bolivia, que ahora debe adaptarse a nuevas realidades y desafíos en el sector energético.