La Aduana Nacional trabaja en una línea base para mejorar los tiempos de despacho y la atención a los operadores de comercio exterior en los puntos fronterizos del país con sus vecinos.

La presidenta de la entidad, Karina Serrudo, explicó que este trabajo se inició el lunes en Yacuiba, frontera con Argentina, con apoyo de la metodología y software de la Organización Mundial de Aduanas (OMA).

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“Esto va a constituir una línea base para ir mejorando los tiempos y así hacer que la gente quiera importar de manera legal por cualquier paso fronterizo porque, además, hemos estandarizado los procedimientos en las 13 fronteras que tiene Bolivia con los cinco países”, indicó en entrevista con Piedra, Papel y Tinta, de La Razón.

Serrudo afirmó que este trabajo permite al país en constituirse en el segundo de la región, luego de Brasil, en aplicar este sistema de estudio para mejorar los tiempos de despacho de mercancías.

Frontera
Por tanto, dijo que se profundizará este sistema y se aplicará a otros puntos aduaneros de control como en Tambo Quemado y Pisiga, frontera con Chile; Puerto Suárez, frontera con Brasil; y Desaguadero, frontera con Perú. Posteriormente se realizará ese trabajo en los aeropuertos.

Con este sistema se busca que todos los operadores de comercio exterior, como Migración, el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag), los despachantes aduaneros y los transportistas, estén avalados por la Aduana y puedan agilizar la importación y exportación de mercancías.

La Aduana se planteó el reto de estandarizar este sistema para aminorar los tiempos de verificación de mercancías por los canales establecidos en los pasos fronterizos.

“Estamos corriendo para estar a nivel de otras aduanas internacionales y es una orden del presidente (Luis Arce) que dejemos una Aduana transparente”, indicó Serrudo.

El lunes, se anunció que entre el 8 y el 21 de este mes se realizará el “Estudio de Tiempos de Despacho” que permitirá medir el tiempo real de los procedimientos de importación en todas sus modalidades.

Dicho estudio es reconocido internacionalmente como una herramienta estratégica para medir el tiempo real requerido en el levante o despacho de mercancías.

Involucra desde el momento de su llegada a frontera hasta el levante físico de la carga. Se apunta a encontrar los obstáculos que existan en el flujo comercial y, posteriormente, tomar medidas necesarias para mejorar los procedimientos fronterizos.

El estudio contempla cuatro fases: la preparación del estudio (plan), la recolección y registro de datos (prueba de validación, cálculo de resultados); el análisis de datos y conclusiones (identificación de resultados, formulación de resultados, informe) y la última, la supervisión y evaluación.

Fuente La Razón