Sudamérica busca consolidarse como proveedor estratégico de litio ante la creciente demanda europea
El reciente avance en las negociaciones entre Mercosur y la Unión Europea ha resaltado el papel crucial del litio sudamericano como un recurso indispensable para la transición energética global. Este metal, abundante en la región, se perfila como un motor de desarrollo económico y estratégico.
Las conversaciones entre el Mercosur y la Unión Europea, en curso desde hace décadas, han tomado un nuevo giro con la atención global sobre los recursos estratégicos. En este contexto, el litio sudamericano, indispensable para la fabricación de baterías de vehículos eléctricos, emerge como una pieza fundamental en las negociaciones comerciales.
Según analistas, países como Argentina y Chile están liderando la exportación de litio, mientras que Bolivia, que alberga las mayores reservas del mundo, busca consolidar su capacidad productiva y atraer inversiones extranjeras para su industrialización. Este desarrollo coincide con el interés europeo de asegurar cadenas de suministro sostenibles frente a la creciente competencia internacional
Por su parte, expertos como Cameron Hughes, de CRU Group, destacan que el mercado del litio enfrenta desafíos, como la fluctuación de los precios y las preocupaciones ambientales asociadas con su extracción. Sin embargo, las oportunidades para Sudamérica son significativas, especialmente si los países logran establecer acuerdos justos y sostenibles con los mercados europeos. Aunque Bolivia no es aún un gran exportador, su inclusión reciente en el Mercosur ofrece una oportunidad única para integrarse en esta dinámica regional. Iniciativas que fomenten el procesamiento local del litio y la adopción de tecnologías menos invasivas podrían posicionar al país como un actor clave en el largo plazo.