El Gobierno boliviano informó que el consumo interno de diésel disminuyó aproximadamente 40% en las últimas semanas, de acuerdo con declaraciones del ministro de Desarrollo Productivo, Óscar Mario Justiniano. La autoridad atribuyó esta reducción a una menor salida ilegal de combustible hacia países vecinos, en el marco de recientes ajustes en la política de precios y control del mercado energético.

La información fue difundida públicamente y se enmarca en la aplicación de nuevas disposiciones sobre la comercialización y el precio de los combustibles. La autoridad indicó que la disminución se observa principalmente en regiones fronterizas, donde históricamente se concentraba una mayor demanda de diésel subvencionado.

Posición del Gobierno sobre el contrabando

De acuerdo con el ministro Justiniano, la reducción del consumo estaría vinculada a una menor salida ilegal de diésel hacia países vecinos. Esta explicación corresponde a la posición oficial del Gobierno, expresada en conferencias y declaraciones públicas.
El Ejecutivo ha señalado en reiteradas oportunidades que el contrabando de combustibles representaba un problema estructural, debido a la diferencia de precios entre Bolivia y mercados limítrofes.

Datos históricos del Ministerio de Hidrocarburos y de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) muestran que Bolivia importa la mayor parte del diésel que consume, lo que convierte a este combustible en un componente relevante de la balanza comercial energética.
La reducción del consumo interno, según cifras oficiales, coincide con un período en el que el Gobierno ha reconocido restricciones en la disponibilidad de divisas para la importación de carburantes.

Impacto en el mercado interno

El diésel es un insumo utilizado en transporte, agroindustria, minería y logística. Las autoridades no han presentado, hasta el momento, datos oficiales que detallen el impacto sectorial específico de la reducción del consumo.
El Ejecutivo ha señalado que el abastecimiento interno se mantiene bajo monitoreo permanente y que la información disponible corresponde al volumen total comercializado a nivel nacional.

Política de combustibles y antecedentes regionales

Bolivia mantuvo durante años un esquema de precios subvencionados para los combustibles, política que fue documentada por organismos internacionales como la Cepal y el Fondo Monetario Internacional en evaluaciones previas del país.
La reciente reducción del consumo de diésel se produce en un contexto de revisión de este esquema, de acuerdo con información difundida por el propio Gobierno.

La disminución del consumo de diésel reportada por el Gobierno constituye un hecho estadístico relevante dentro de la política energética boliviana. Al tratarse de información basada en registros oficiales y declaraciones ministeriales, su evolución y efectos deberán ser evaluados a partir de datos adicionales que permitan medir su impacto fiscal, productivo y comercial con mayor precisión. La consistencia y continuidad de estos registros será clave para el análisis económico en los próximos meses.