En el marco de la firma de compromiso de Gobernanza Transformacional del Pacto Global de Naciones Unidas realizado en instalaciones de CAINCO, Tigo compartió cinco buenas prácticas de Gobernanza implementadas en la compañía como parte de su Programa de Ética y cumplimiento. La adecuada gestión de la gobernanza empresarial implica desarrollar acciones integrales para lograr
En el marco de la firma de compromiso de Gobernanza Transformacional del Pacto Global de Naciones Unidas realizado en instalaciones de CAINCO, Tigo compartió cinco buenas prácticas de Gobernanza implementadas en la compañía como parte de su Programa de Ética y cumplimiento.
La adecuada gestión de la gobernanza empresarial implica desarrollar acciones integrales para lograr la sostenibilidad del negocio y una reputación que genere confianza de colaboradores, clientes, proveedores, inversionistas y demás públicos, contemplando factores como la cultura, transparencia, evaluación de riesgos y monitoreo de cumplimiento en todos los niveles.
Las mejores prácticas son:
- Analizar riesgos, monitorearlos y realizar una mejora continua. Empresarios de la telefónica aseguran que la revisión continua de riesgos, la evaluación e implementación de cambios normativos, los controles y reportes sobre el seguimiento al programa de gobernanza, así como la realización auditorías internas y externas, son factores fundamentales.
- Contar con mecanismos de reporte confiables. Se sugiere establecer la declaración de conflictos de interés y de interacción con funcionarios de Gobierno, como parte de las normativas de la organización, además de mantener canales de comunicación abiertos a todos los grupos de interés.
- Generar compromiso de la Alta Dirección. Definir la estructura y gobierno corporativo, crear objetivos asociados al programa y promover un liderazgo basado en el ejemplo.
- Contar con lineamientos claros y escritos. Desarrollar un código de ética para colaboradores y proveedores con políticas y procedimientos claros.
- Promover comunicación y entrenamiento constante. Dirigirse a los colaboradores, así como a grupos de interés mediante entrenamientos frecuentes. En Tigo, promovemos, por ejemplo, la semana de la integridad y la difusión de contenido relacionado en boletines e Intranet.
“El éxito del programa de Ética y Cumplimiento de Tigo está basando en permear la cultura de integridad de manera transversal en la organización. Todas nuestras políticas se enfocan en proteger a Tigo Bolivia de riesgos de incumplimiento cómo: soborno, corrupción, potenciales conflictos de interés, conducta indebida y otros. Sostener la misión de promover el cumplimiento de los objetivos del negocio de la manera correcta, fortalecer y proteger su reputación”, indicó Rodrigo Rojo, director de Asuntos Corporativos de Tigo Bolivia.
A través de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia y la Embajada de Suecia en el país, varias empresas, entre ellas Tigo, firmaron un acuerdo con el objetivo de implementar estrategias, políticas y operaciones basadas en valores con todos sus grupos de interés con el desafío de implementar la gobernanza transformacional como una filosofía basada en principios que fomentan en las empresas una cultura de integridad, equidad e inclusión.