Las exportaciones a Brasil y Argentina cesarán en 2030, dice la consultora internacional Wood Mackenzie.
La producción de gas natural en Bolivia caerá más rápido de lo esperado y Brasil podría no tener energía de nuestro país a finales de la década, evalúa la consultora Wood Mackenzie. La previsión es que Bolivia, actualmente y desde hace varias décadas gran exportador, empiecen a importar gas.
“La producción en Bolivia ha estado en constante declive desde 2015, con un ligero aumento en 2021”, dijo Amanda Bandeira, analista de Upstream para América Latina de Wood Mackenzie. «Sin embargo, con pocos descubrimientos nuevos y poca oferta en campos maduros, la producción comenzará a disminuir a un ritmo mucho más rápido. Actualmente, la demanda interna consume alrededor del 30 % de la oferta total. Para 2030, es probable que la demanda interna supere esta oferta y es posible que veamos a Bolivia convertirse en un importador».
Según el informe, se requerirá un impulso de exploración y nuevos descubrimientos en Bolivia para revertir la tendencia de producción, sin embargo, los esfuerzos iniciales no han tenido éxito.
Agregó Kuy Hun Koh Yoo, analista de Upstream para América Latina de Wood Mackenzie: “En 2021, el gobierno boliviano lanzó un plan de exploración, pero solo tres de los veinte pozos anunciados fueron perforados y han estado secos. Además, los términos fiscales de Bolivia se encuentran entre los menos competitivos de la región latinoamericana. Estos han hecho poco para atraer capital de fuera del país para más contratos de exploración”.
La disminución proyectada también tendrá un efecto dramático en el mercado de exportación. El gas natural es un sector crucial para la economía de Bolivia, donde las exportaciones a los vecinos Brasil y Argentina juegan un papel fundamental. Las exportaciones a estos dos países representan más del 70% de las ventas totales de gas y el 20% de las exportaciones totales.
“Argentina ha ampliado su producción, reduciendo la importancia del gas boliviano, pero Brasil todavía requiere muchas importaciones”, dijo Henrique Anjos, analista de gas y energía para América Latina de Wood Mackenzie. “Si Bolivia no logra desarrollar una producción adicional, las exportaciones se detendrán para 2030, ya que la demanda interna supera la producción. Las energías alternativas podrían jugar un papel importante en la sustitución del desfase del gas doméstico”.
Con información de woodmac.com – Radar Energético