El banco de inversión prevé turbulencias en los mercados por las políticas comerciales de EE.UU.
Las recientes imposiciones arancelarias por parte del presidente estadounidense Donald Trump han generado una notable volatilidad en los mercados financieros internacionales, afectando índices bursátiles y monedas clave. Expertos anticipan que esta tendencia podría intensificarse a lo largo de 2025.
Impacto global de los aranceles
El anuncio de aranceles del 25% a las importaciones provenientes de México y Canadá, y del 10% a las de China, ha provocado caídas significativas en las principales bolsas mundiales. Índices europeos como el DAX alemán, el CAC francés y el FTSE 100 británico registraron descensos superiores al 1%. En Estados Unidos, los futuros del Dow Jones, S&P 500 y Nasdaq indicaron disminuciones entre el 1% y 2%.
Además, el dólar estadounidense se fortaleció frente a varias divisas, alcanzando un máximo de 20 años frente al dólar canadiense. El peso mexicano también experimentó una caída cercana al 3% antes de recuperarse parcialmente. Estas fluctuaciones reflejan la incertidumbre que impera en los mercados ante posibles represalias comerciales y sus consecuencias económicas.
Perspectivas para 2025
Una encuesta anual de JPMorgan Chase reveló que el 51% de los operadores financieros consideran que los aranceles y la inflación serán los principales factores que influirán en los mercados durante 2025, superando el 27% que expresó preocupación por la inflación el año anterior. Eddie Wen, responsable mundial de mercados digitales de JPMorgan, señaló que «los mercados están reaccionando a los titulares de las noticias de forma sorprendente, y espero que esta tendencia continúe en el clima actual».
Analistas de Societe Generale también advierten sobre una ventana cada vez más reducida para que la volatilidad disminuya, anticipando un aumento de la misma hasta 2025 y 2026. Factores como la incertidumbre en torno a las políticas arancelarias de EE.UU., tensiones geopolíticas y valoraciones excesivas podrían desencadenar más oscilaciones en los mercados.
Aunque Bolivia no es un actor principal en el comercio internacional, las fluctuaciones en los mercados globales pueden tener repercusiones indirectas en su economía. La volatilidad en los precios de materias primas y posibles alteraciones en las cadenas de suministro podrían afectar tanto a exportadores como a importadores bolivianos. Es esencial que empresarios y consumidores locales se mantengan informados y preparados para adaptarse a este entorno económico cambiante.