La estatal boliviana busca aumentar reservas de gas con un potencial estimado de 1,05 TCF.
YPFB ha iniciado la perforación del pozo Inau X3D en Chuquisaca, una de las iniciativas más ambiciosas en el sector hidrocarburífero del país. Con una inversión de 783 millones de dólares, este proyecto promete fortalecer la matriz energética boliviana al apuntar a un reservorio con un potencial de 1,05 trillones de pies cúbicos de gas natural. La estata YPFB ha puesto en marcha el proyecto de exploración del pozo Inau X3D, ubicado en la provincia Luis Calvo, departamento de Chuquisaca. Esta perforación, que forma parte del Plan de Reactivación del Upstream del gobierno, se desarrolla en el área tradicional del Subandino Sur, una región estratégica para el sector energético nacional.
Según la empresa, el objetivo es alcanzar una profundidad de 4.300 metros, donde se espera encontrar hidrocarburos en las formaciones geológicas Huamampampa y Santa Rosa. De confirmarse el potencial del yacimiento, este representaría un importante aporte a las reservas de gas natural del país, contribuyendo a consolidar a Bolivia como un actor relevante en el mercado energético regional.
El presidente de YPFB, Armin Dorgathen, destacó que este proyecto es un reflejo del compromiso del gobierno por revitalizar el sector. “La inversión en exploración es clave para garantizar el desarrollo sostenible de la industria y fortalecer nuestra economía”, señaló en el evento inaugural. Además, la iniciativa podría generar importantes beneficios para Chuquisaca, desde la creación de empleos directos e indirectos hasta el incremento de ingresos por regalías. Esto resulta crucial en un contexto donde el país busca diversificar sus ingresos y reducir la dependencia de mercados externos.
El proyecto Inau X3D también se inscribe dentro de un esfuerzo más amplio que incluye exploraciones en otras regiones del país, como los recientes avances en el Subandino Norte y la Cuenca Tarija-Chaco. Estas iniciativas buscan contrarrestar la caída en la producción de gas registrada en los últimos años, asegurando la sostenibilidad energética para las próximas décadas.