728 x 90

Bolivia lucha por superar un riesgo país que ralentiza su crecimiento económico

  • En Pais
  • 21 de enero de 2025
Bolivia lucha por superar un riesgo país que ralentiza su crecimiento económico

En el inicio de 2025, Bolivia continúa enfrentando un riesgo país elevado, situándose en 2.092 puntos básicos. Este indicador refleja las persistentes preocupaciones de los inversores sobre la estabilidad económica y política del país. El riesgo país, medido por el Índice de Bonos de Mercados Emergentes (EMBI) elaborado por JPMorgan Chase & Co., compara los

En el inicio de 2025, Bolivia continúa enfrentando un riesgo país elevado, situándose en 2.092 puntos básicos. Este indicador refleja las persistentes preocupaciones de los inversores sobre la estabilidad económica y política del país. El riesgo país, medido por el Índice de Bonos de Mercados Emergentes (EMBI) elaborado por JPMorgan Chase & Co., compara los rendimientos de los bonos soberanos de países emergentes con los bonos del Tesoro de Estados Unidos. Un diferencial alto indica una mayor percepción de riesgo por parte de los inversores. En el caso de Bolivia, el EMBI se ha mantenido en torno a los 2.000 puntos básicos desde su deterioro en 2023, posicionándolo entre los más altos de América Latina, solo superado por Venezuela, que registra 24.970 puntos.

La economía boliviana ha enfrentado desafíos significativos, incluyendo una disminución en las exportaciones de gas natural y una reducción de las reservas internacionales. Estos factores han generado tensiones en el mercado cambiario y preocupaciones sobre la capacidad del país para cumplir con sus obligaciones financieras. Además, la inestabilidad política, evidenciada por la fractura entre el presidente Luis Arce y el exmandatario Evo Morales, ha contribuido a un ambiente de incertidumbre que afecta negativamente la percepción de riesgo.

Situación regional

En contraste, países como Chile y Uruguay presentan los niveles más bajos de riesgo país en la región, con 121 y 89 puntos básicos respectivamente, reflejando economías más estables y políticas fiscales prudentes. Por su parte, economías de mayor tamaño como Brasil y México registran 222 y 317 puntos básicos, situándose en niveles intermedios dentro del contexto latinoamericano.

Perspectivas y desafíos

El panorama para reducir el riesgo país en Bolivia pasa necesariamente por implementar estrategias económicas sólidas y sostenibles. Una de las prioridades debe ser la diversificación de la economía, actualmente dependiente de los hidrocarburos, con un enfoque en sectores como el litio, la agroindustria y el turismo, que podrían generar un impacto transformador en el mediano plazo. Al mismo tiempo, la mejora de las instituciones es esencial para aumentar la transparencia fiscal y garantizar una gestión eficiente de los recursos públicos.

En el ámbito político, la fractura entre el gobierno y sectores opositores continúa frenando el avance de reformas necesarias. Esta inestabilidad, sumada a la incertidumbre sobre la sucesión del liderazgo político, refuerza las percepciones de riesgo entre inversionistas internacionales. Expertos destacan que abordar estas tensiones, priorizando el diálogo nacional y acuerdos de largo plazo, podría facilitar un entorno económico más predecible y atractivo para el capital extranjero.

Bolivia también enfrenta el desafío de revertir la caída de sus reservas internacionales, las cuales han tocado niveles críticos, limitando su capacidad para intervenir en los mercados cambiarios y cumplir con sus obligaciones de deuda externa. La confianza de los mercados dependerá de medidas concretas como el control del gasto público, la atracción de inversiones externas y la apuesta por nuevos motores de crecimiento.