En un esfuerzo por revitalizar el sector agroindustrial, el viceministro de Políticas de Industrialización, Luis Siles, anunció un preacuerdo con los productores de Santa Cruz para liberar la exportación de grano de soya. Esta medida busca beneficiar directamente a los productores primarios, ajustando las normativas actuales que permiten que cualquier persona pueda exportar este grano.

Las negociaciones, que se llevaron a cabo en Santa Cruz, respondieron a las demandas de sectores interculturales que exigían el levantamiento del veto a las exportaciones y la regularización en la dotación de diésel. El dirigente de Concepción, René Pérez, confirmó el preacuerdo y destacó el compromiso gubernamental de liberar las exportaciones de soya, aunque no se precisó una fecha exacta para la implementación de la medida.

Esta iniciativa se enmarca en un contexto donde, en febrero de 2024, el Gobierno ya había autorizado la libre exportación de subproductos de soya, como torta, harina integral, aceite crudo y refinado, con el objetivo de agilizar los trámites y fomentar la generación de divisas para la economía nacional. En esa ocasión, se entregaron certificados con validez de un año a 34 empresas oleaginosas, garantizando el abastecimiento interno antes de permitir las exportaciones.

La soya es uno de los principales productos agrícolas de Bolivia, y su exportación representa una fuente significativa de ingresos para el país. La implementación efectiva de este preacuerdo podría fortalecer la economía nacional y proporcionar un impulso necesario al sector agroindustrial. Sin embargo, es fundamental que el Gobierno y los productores trabajen en conjunto para establecer mecanismos claros que aseguren el cumplimiento de los compromisos adquiridos, garantizando tanto el abastecimiento del mercado interno como el éxito de las exportaciones en el mercado internacional.