La Cámara Nacional de Industrias demanda al Ejecutivo que haga pública la información real sobre el abastecimiento de hidrocarburos. Advierten que la escasez de diésel y gasolina ya está paralizando operaciones industriales y amenaza la provisión de bienes esenciales.
Alarma empresarial: producción en riesgo por falta de claridad
La CNI emitió un comunicado este lunes en el que exige al Gobierno nacional que divulgue cifras claras y precisas sobre el estado real del abastecimiento de combustible en Bolivia. El gremio industrial subraya que la actual opacidad genera un clima de incertidumbre que ya está afectando las operaciones del sector manufacturero. Según el pronunciamiento, la escasez progresiva de diésel y gasolina está paralizando actividades productivas fundamentales, comprometiendo la entrega de bienes manufacturados tanto al mercado interno como al externo.
El gremio señala que el desconocimiento de los niveles reales de reservas, despacho y logística impide que las empresas puedan planificar, tomar decisiones de inversión o mitigar riesgos operativos. Además, advierte que la falta de información alimenta la especulación de precios y desalienta la confianza del público y del sector productivo.
Impacto directo sobre bienes esenciales y cadena de producción
La CNI alerta que este déficit energético golpea rubros clave como alimentos, bebidas, productos farmacéuticos y otros insumos industriales. Dado que muchos procesos requieren transporte de materias primas y distribución de productos terminados, la falta de combustibles actúa como cuello de botella logístico.
Este riesgo se agrava en regiones alejadas donde la logística depende fuertemente de rutas largas y transporte terrestre. Una falla en el suministro impacta directamente los costos de producción y puede trasladarse al consumidor final. Asimismo, el gremio advierte que de continuar esta situación, podría intensificarse la escasez de bienes básicos y comprometerse la seguridad alimentaria del país.
Restricciones estructurales y obstáculos a la transparencia
El reclamo de la CNI llega en un contexto en el que el Gobierno ha atribuido la crisis energética a la falta de dólares para importar combustibles, situación que se ha visto agravada por la adjunta retención de créditos externos pendientes de aprobación en la Asamblea Legislativa.
Para el sector industrial, esas explicaciones no son suficientes sin datos públicos que validen o contradigan las afirmaciones oficiales. Exigen que se publique el volumen real de combustibles importados, los saldos disponibles, planes de distribución y plazos de normalización. Sin ese nivel de detalle, las declaraciones quedan como discursos políticos sin respaldo técnico. El gremio insta al Ejecutivo a “transparentar la situación real del abastecimiento de hidrocarburos” y asumir medidas “prudentes, oportunas y responsables para evitar el colapso del aparato productivo nacional”.
La CNI también advierte que prolongar la crisis sin respuestas claras puede desincentivar inversión privada, provocar cierres parciales de empresas y agudizar la desconfianza en los mercados nacionales e internacionales.