El sector ganadero alerta que los bloqueos afectan contratos internacionales y exigen respuestas ante dos decretos que consideran riesgosos para la exportación.
Las rutas bloqueadas en varias regiones del pais han comenzado a pasar factura al sector ganadero, que enfrenta crecientes dificultades para cumplir con contratos internacionales de exportación de carne, especialmente hacia mercados asiáticos. Según Fegasacruz, la imposibilidad de transportar mercancía debido a estos bloqueos pone en peligro los contratos establecidos, un problema que, si no se soluciona, podría desencadenar en la pérdida de mercados estratégicos para la industria cárnica boliviana.
“La situación actual genera un impacto directo en las exportaciones y amenaza con reducir la confianza de nuestros socios internacionales en Bolivia como proveedor confiable”, señaló un representante de Fegasacruz, subrayando que los bloqueos no solo afectan la economía del sector, sino también la credibilidad del país en el mercado global.
A estas dificultades se suman los efectos de dos decretos presidenciales que, según los ganaderos, representan una amenaza para el desarrollo económico de la industria. Ambos decretos, en su conjunto, imponen restricciones y condiciones adicionales que los productores consideran contrarias al crecimiento y a la competitividad en el ámbito internacional. La preocupación en torno a estas normativas llevó a la Federación de Ganaderos de Santa Cruz a solicitar una reunión directa con el presidente Luis Arce para discutir las implicancias de estas disposiciones.
Los productores han expresado que, si bien entienden la necesidad de regular ciertos aspectos de la industria, estas normativas podrían ser excesivas y contraproducentes en el actual contexto de crisis, afectando aún más la productividad y la exportación. “La falta de flexibilidad en las nuevas normativas pone en jaque a un sector que ya enfrenta múltiples desafíos”, indicó un representante del gremio ganadero.
De acuerdo con los empresarios del sector, cualquier regulación que afecte la capacidad exportadora de Bolivia no solo golpea a los productores, sino también a la economía en general, al reducir el ingreso de divisas que contribuyen al desarrollo económico nacional. En este sentido, Fegasacruz espera que el gobierno considere los aportes y preocupaciones del sector, y trabaje en soluciones que permitan fortalecer la producción y exportación sin comprometer los intereses del país.